Fernando Tano Ortiz y Álvaro Fidalgo mostraron categoría tras fracasar con las Águilas del América

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CIUDAD DE MÉXICO.- Las Águilas del América quedaron eliminadas de la gran final del futbol mexicano, luego de caer 3-1 en el partido de vuelta de las semifinales de la Liga Mx ante las Chivas; esto provocó un verdadero tsunami para uno de los equipos más populares del futbol mexicano y generará la salida de varios integrantes del actual equipo, se viene la limpia y es inevitable.

El América de Miguel Herrera o más recientemente de Santiago Solari, se había convertido en un equipo protagonista, de grandes momentos, inclusive de récords en partidos invictos o puntos, pero no lograba alcanzar el título, ese trofeo número 14 de liga que se le ha negado una y otra vez.

La arriesgada apuesta de sustituir a Solari con un desconocido Fernando Tano Ortiz, quien entró en principio de forma interina, poco a poco fue dando frutos y entregó a un estratega identificado con los colores del club, de una madurez y capacidad inusitada para sus orígenes y de resultados inmediatos, algo indispensable para su afición.

El domingo por la noche, en un discurso que duró apenas un minuto, Fernando Tano Ortiz correspondió a la categoría que lo había venido acompañando desde el inicio de su gestión, pues no solo reconoció que Chivas los había superado, sino que además de forma unilateral y sin esperar a ser despedido por la directiva tomó la decisión de hacerse a un lado.

“Mi etapa y la del cuerpo técnico que encabezo, en el club, ha concluido”, dijo un apesadumbrado Ortiz que optó por tomar el problema de frente y asumir su responsabilidad, quizá para él hubiera sido más fácil escudarse en la expulsión de Álvaro Fidalgo, en algún error arbitral o cualquier situación, no lo hizo y dejó intacta su imagen a pesar del fracaso deportivo.

Para el América será difícil encontrar un entrenador mejor que Fernando Ortiz en este momento, eso si no opta por convencerlo de dar marcha atrás a su decisión, pues Tano era simplemente el ideal pese a su falta de resultados en la fase final.

Aunque hay otros nombres capacitados para dirigir al América, en estos momentos en el entorno del club no hay un personaje de la calidad moral que logró acumular en tan poco tiempo Fernando Ortiz.

Fernando Tano Ortiz y Álvaro Fidalgo asumieron el fracaso con las Águilas.

La punta del iceberg

Pero el declive del domingo traerá consigo también un posible cambio en la presidencia del club, pues Santiago Baños se tambalea y de ahí podría iniciar una nueva era, tal y como ocurrió con Chivas cuya primera gran decisión seis meses atrás fue la de darle las gracias a Peláez y contratar a Fernando Hierro.

Ya en meses pasados se hablaba de Jorge Valdano como una gran carta para tomar este rol en las Águilas, ¿Será que el exmadridista esté interesado en el proyecto?.

Pero no solo Fernando Ortiz estuvo a la altura de lo ocurrido en una noche negra para el América, también uno de los jugadores emblema de la era Solari, el español Álvaro Fidalgo, dejó en claro que siente los colores del club y que su calidad va más allá del campo de juego.

Fidalgo, expulsado al minuto 66 en el juego, en una acción que cambiaría el rumbo de la eliminatoria, salió directo a hablar con los medios de comunicación, a los que dijo con claridad que asumía todo el costo del fracaso y que lo sucedido solo era su culpa, algo de lo que nadie lo había acusado, pero que tomó de manera valiente y responsable.

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Fidalgo, que nunca había sido expulsado en México, se contagió de la excesiva presión mediática que rodea al club y fue superado por el entorno que provocó un descontrol en sus emociones, el resultado una falta propia de un partido de alta intensidad, de la que el español ni ningún otro futbolista son totalmente culpables.

Además, durante su comparecencia con los medios de comunicación adelantó su salida del club, pues dijo sería muy difícil continuar con el peso del fracaso en el torneo a sus espaldas, es decir, Fidalgo decidió ya cargar con la derrota, aunque esto le cueste su carrera en el futbol mexicano.

América volvió a fracasar en su intento por lograr el título de liga, pero al menos dos de sus hombres más importantes de los últimos años mostraron una categoría pocas veces vista y que le da esperanzas para un futuro mejor.